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¿Asegurar los extras de mi coche?

Una adecuada valoración del vehículo es fundamental para no tener problemas a la hora de recibir una indemnización o exigir a tu aseguradora que te repare en las mismas condiciones en las que estaba tu vehículo en el momento anterior a un siniestro.

Cuando aseguras tu coche con garantías de daños (robo, incendio y daños propios o a todo riesgo), los datos de marca, modelo, versión, año,… se traducen en un valor económico para la aseguradora y en consecuencia, este valor será el declarado en el contrato como el valor del vehículo.

Para adecuar este valor debes declarar los extras de tu vehículo y que figuren en tu póliza de seguros.

Extras son todo el equipamiento no de serie que esté en tu coche.

Algunos ejemplos de extras:

  • Pintura metalizada
  • Techo panorámico
  • Asientos de cuero
  • Navegador
  • Radio
  • Lunas tintadas
  • Llantas
  • El enganche del remolque
  • …/…

Puede ser que el coche que compres lleve extras y no te los cobren, ya sean ofertas puntuales del concesionario o de la marca. A efectos del seguro, sí que debes incluirlos en la póliza, de lo contrario, en el caso de un siniestro el valor a indemnizar será, exclusivamente, el del modelo indicado en el contrato, no se tendrán en cuenta estos accesorios.

Nuestro consejo es que aportes la factura de la compra del vehículo para que no exista ninguna duda y verifica que estén detallados en tu póliza.

En el supuesto de que seas propietario de un vehículo tuning, debes poner especial interés en incluir estas modificaciones en la póliza de seguros y que estén valoradas correctamente.  No todas las aseguradoras están dispuestas a dar cobertura a este tipo de coches, ya que son coches muy caros y exclusivos.

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