Casi prefiero, personalmente, conducir de noche. Fundamentalmente por dos motivos, el primero, la carretera está más despejada y segundo mis hijas van durmiendo, y la verdad, voy más tranquilo. Además de este comentario tan particular, hay otras cuestiones importantes, te las explicamos.
Consejos para conducir de noche:
- Si viajas a un sitio nuevo, comprueba la ruta previamente, verificando donde están las gasolineras, aéreas de descanso, y consulta la información meteorología.
- Ajusta la velocidad a la vía por la que circules. Por si no te has dado cuenta, el alcance de la visión llega hasta donde llega la luz de los faros. Ve a una velocidad que te permita controlar y frenan el coche.
- Nunca te fíes de lo puede hacer el vehículo que te precede, mantén una distancia de seguridad razonable. Recuera que el que «alcanza» siempre es culpable en un siniestro.
- Cuando circules por una autovía o autopista, especialmente, vigila los retrovisores, siempre hay alguien que va muy rápido y te puede sorprender.
- Realiza las paradas que sean necesarias. Para cada cierto tiempo a despejarte y tomar aire, o toma un café y saluda al personal que trabaja de noche.
- Las luces de tu coche son lo más importante para ver y que te vean. Comprueba que estén en perfecto estado y ajustadas a la carga del vehículo.
- Canta tu música preferida o comenta con los locutores de la radio, así evitarás que te entre el sueño.
- Si sufres deslumbramientos por los otros vehículos, aminora paulatinamente tu velocidad y controla la línea continua de la derecha.
- En condiciones atmosféricas adversas, ajusta tu velocidad a la más adecuada para no perder el control de coche nunca y si es necesario busca una vía de servicio y despasar la tormenta.
- NO TE CONFIES NUNCA, no bajes la guardia.
Si se te ocurre algún otro consejo que nos pueda ayudar, ¡comprármelo con nosotros!